jueves, 22 de septiembre de 2016

Vecino/a, el alcalde se ríe de ti

Os dejo el artículo que se publicará en la próxima edición del Hola que el alcalde ha perpetrado con el dinero de todos. Antes de que lo vean en letra impresa, lo dejo aquí para los vecinos. Espero que os guste. (La foto es de www.políticalocal.es)


Muy buenas.
En esta columnita que el alcalde nos deja en su “periódico”, aunque pagado del erario, me veo obligado a informar de lo que no vas a leer en el resto de páginas de este panfleto. La conclusión que merece la “progresista” persona que rige esta ciudad en colaboración con un tránsfuga, un expulsado de IU y los ediles del PP que se han rendido a los encantos del ladrillo, es que se ríe en la cara de los 190.000 vecinos de Leganés.

Salvo a enchufados y demás miembros del cortijo en el que ha convertido al ayuntamiento, a nadie le puede hacer gracia que le traten por tonto. Y por tontos ha tratado a los miembros de la Casa Regional de Andalucía a los que ha engañado con la nueva sede, y por tontos ha tratado a los de la Agrupación Musical El Fénix de la Esperanza a los que han desahuciado de donde ensayaban, y por tontos trata a quienes llevan a sus niños a las escuelas infantiles Jeromín y Fortuna a los que tiene sin profesores, y por tontos trata a los deportistas cuando ven el estado de La Cantera y del Manuel Cadenas y por tontos trata a los que están pidiendo becas para libros y ven la chapuza que se ha perpetrado, y por tontos trata a los vecinos cuando les cuenta que las últimas fiestas de Butarque han sido las mejores de la Historia, y por tontos trata a todos aquellos a los que oculta que hay últimamente más robos en viviendas o cuando niega demandas legítimas como arreglar la abandonada calle Río Nervión, las pistas de atletismo y el graderío de El Carrascal, reivindicaciones culturales o atender la suciedad o la falta de mantenimiento en multitud de calles porque no hay dinero, pero sí hay 12 millones de euros para una rotonda en Legatec para favorecer el negocio de una empresa de bebidas, 2,5 millones para una Sociedad Anónima Deportiva, 50.000 € para un fotógrafo para que retrate al alcalde o un pastizal para toros, comilonas, conciertos o montar en estas fiestas de San Nicasio la “mayor noria de Europa”. Pero los vecinos no son tontos. Por eso cada vez el PSOE y sus socios de negocio político del PP tienen menos votos en Leganés.

Aprovecho vecino para animarte a que te enteres de lo que pasa realmente en Leganés y a qué destinan tus impuestos acudiendo o viendo los Plenos municipales y poniéndote en contacto con ULEG. Te pido que me ayudes a mejorar nuestra ciudad. Vivo y siento Leganés, por eso mi compromiso es tal que también tendrás lo que difícilmente te darán el resto de políticos, mi número de móvil personal. Aquí lo tienes: 657335726. A tu disposición.


Hablamos.

martes, 20 de septiembre de 2016

Disfrutemos lo votado

El ser humano es muy dado a buscar culpables. La autocrítica no es un accesorio habitual en el kit con el que llegamos al mundo. Tampoco es cuestión de flagelarse o victimizarse, pero hay que reflexionar seriamente qué parte de lo que sucede tiene causa directa en los hechos de cada uno, sin tener que acudir a chivos expiatorios (no ganamos por el árbitro, suspendo porque el profe me tiene manía...). Este sano ejercicio puede practicarse en todas las esferas de la vida y en esta ocasión lo quiero predicar para un ámbito donde es una ley de hierro el descargar las responsabilidades en espaldas ajenas: la política.

Los gobernantes, los políticos, lo representantes que gestionan los recursos públicos son objeto, en la mayoría de los casos con razón, de duras críticas, destinatarios de las iras ciudadanas por sus comportamientos nada ejemplares, derroches, incompetencias, despotismos, falta de sensibilidad... Y aunque puedo dar fe de que hay personas honradas y eficaces en el mundo de la política y en todos los partidos, es cierto que la mediocridad, por no utilizar un término más duro, es la nota predominante. ¿Pero por qué están esos representantes públicos/partidos y no otros? ¿Por qué se eternizan determinados comportamientos y actitudes que deploramos? Se pueden dar varios motivos, pero hay uno fundamental: porque así lo han decidido los ciudadanos en las urnas. Podemos excusarnos en el "sistema", en una injusta Ley Electoral, en la oligarquía de unos poderes fácticos que controlan los mensajes y los medios de comunicación, en el "todos son iguales", en el "no tengo tiempo para esas cosas"... Hay tantas justificaciones como individuos. Pero no olvidemos la fundamental: el voto.

Sí, el voto es el principal, por no decir casi el único incentivo que puede movilizar, producir cambios, transformar realidades. Hay otros métodos, pero creo como se atribuye a Churchill que lo de votar es el sistema más malo a excepción de todos los demás. Pues bien, ese poder que otorga el voto es ejercido como es ejercido y da el resultado que da. Y votar es, o debería ser, una decisión individual, libre, meditada, responsable, comprometida y sin vocación de ser un cheque en blanco. La política no debería ser ajena a otros ámbitos y el sistema de incentivos (premios/castigos) tampoco. Si un tendero te da un mal producto puedes perdonarle una vez (ha sido un error, es amigo y lo paso por alto, me cae bien...), pero si ese error se repite, ya puede caerte bien, ser tu amigo o lo que sea que cambiarás de tienda y de tendero. ¿Por qué ese incentivo es tan difícil de aplicar a la política? ¿Por qué hay más fanatismo en algo tan básico y fundamental porque afecta a cada área de nuestra vida que en, por ejemplo, el fútbol? ¿Es racional defender (votar) a determinados partidos o responsables políticos con reiterados episodios de corrupción, abusos de poder, mala gestión como si se trasladara aquello de "Viva el Betis manque pierda"?

Con este post quiero que seamos capaces de mirar la luna y no al dedo que la señala. Tal vez no tengamos lo que nos merecemos. ¿Pero hacemos algo para merecer otra cosa? De momento, y aterrizando en lo que pasa en Leganés y la descorazonadora situación que genera ver el triste y nepótico gobierno y satélites que rigen los destinos de este querido municipio, junto al fiasco de lo que se sabía que iba a serlo, sólo nos cabe decir: DISFRUTEMOS LO VOTADO.

Para 2019, y lo digo con total ilusión y esperanza porque las cosas cambian aunque sea despacio, esperemos que estas reflexiones no caigan en saco roto.

viernes, 2 de septiembre de 2016

La verdad antes que la paz

Es una frase célebre de Miguel de Unamuno y que he vuelto a rememorar con la lectura de un libro sobre la vida del famoso periodista José María García. Unida a esa otra de "la verdad os hará libres" hace que en este primer post del curso político ponga énfasis en ese mágico término: verdad. La verdad existe, aunque casi nunca es patrimonio de una sola persona. La verdad es una búsqueda y es un encuentro. La verdad es una actitud ante la vida, donde se huye del tópico, del convencionalismo y de la cobardía complaciente. La verdad duele, pica y molesta, sobre todo al poderoso. La verdad no necesita cómplices y antes o después termina triunfando. La verdad genera enemigos y cuadra mal con la paz, sobre todo con la denominada "paz de los cementerios".

Una verdad que en Leganés el alcalde la quiere bizcochear, manipular, ocultar o negociar. Para eso, con los recursos de los vecinos, encontrarán en los próximos días en sus buzones una "La Plaza reloaded". En esa "publicación" encontrarán este artículo que os transcribo aquí en primicia.

Porque querido alcalde D. Santiago Llorente, como dijo Machado "tu verdad no; la verdad y ven conmigo a buscarla. La tuya, guárdatela". Y tus despilfarros en fotógrafos, comilonas, canonjías y sinecuras varias, también.

Este “periódico”, derroche de dinero público para intoxicar

Hola vecinos.
En Unión por Leganés-ULEG nos gusta llamar a las cosas por su nombre. A diferencia de otros partidos, hipotecados por la corrupción, la inexistencia de proyecto y que actúan como si el ayuntamiento fuera un cortijo, somos libres e independientes. Y afirmo esto para, además de desearles un feliz comienzo de curso, decir sin más preámbulos que este periódico es absolutamente prescindible, un despilfarro de 120.000 euros de dinero público al año con el fin de resucitar lo que ya fue la funesta “La Plaza”, un “Hola” del alcalde de turno.

En este “periódico” vendrán pocas informaciones que de verdad interesen a los vecinos y le ayuden a tener un conocimiento fiel de lo que pasa en el ayuntamiento. Verán fotos del alcalde por doquier, besamanos y noticias teledirigidas a mayor gloria del gobierno existente en Leganés, el formado por PSOE, PP, IUCM y un tránsfuga, el edil expulsado por Ciudadanos. Sí, esos partidos e individuos son los que nos desgobiernan y nunca lo dirán en estas páginas. Aquí no leerán cómo en esta ciudad se gastan 26.000 euros en una tarde de toros, la misma cantidad que para educación para adultos en todo un año, o que en un día nos gastamos 50.000 euros en una ópera, mientras 15.000 vecinos en paro pasan apuros y tienen que escuchar que no hay recursos. No detallarán los miles de euros de todos los vecinos que el alcalde gasta en comilonas en restaurantes de lujo como el Txistu, ni le contarán que los presupuestos actuales son ilegales, que son los presupuestos que aprobó el PP a puerta cerrada, pero que defiende el PSOE y sus satélites a pecho descubierto. No explicarán que EMSULE es un chiringuito de enchufismo donde la esposa del alcalde es la directora financiera y donde el portavoz del PP actúa como si aún fuera el concejal de urbanismo.


Desde ULEG vamos utilizar este espacio para exigir el fin de estas corruptelas. Las prioridades son otras y en ULEG lo tenemos claro. Ya sabemos que con la excusa de que se informa de las actividades del ayuntamiento o de la agenda (algo que ya se hace en otros medios, webs o redes) colarán noticias tendenciosas y propagandísticas. El dinero público no está para esto. Está para atender las necesidades básicas de los vecinos, para mejorar su calidad de vida, para hacer progresar a la ciudad. No está para un álbum del alcalde y sus mariachis. Y lo diremos en cada artículo hasta que logremos lo que entendemos es la responsabilidad de un gobernante: atender los intereses de todos y no llenar egos y tics partidistas de nadie, por muy alcalde que sea.