viernes, 16 de marzo de 2007

Las privatizaciones ¿Buenas o malas?

Me gustaría razonar con vosotros sobre esta materia más allá de los tópicos habituales.
Simplificando mucho para no enrollarnos se puede definir a la privatización como la puesta en manos de empresas particulares (privadas) de la gestión de un servicio que hasta ese momento realizaba una administración o empresa pública.

La privatización puede alcanzar diversos grados, ya que se puede mantener pública o no la gestión en sí, establecer controles o no por parte de la administración, conservar “acciones de oro”, mantener o no la gratuidad o establecer “peajes en la sombra”… Y es que en la realidad económica y empresarial los límites entre público y privado muchas veces se diluyen, véase casos como la opa de Endesa, la guerra de las televisiones digitales…

La teoría dice que con la privatización se logra más eficacia, más calidad y menos coste ya que el Estado (o los poderes públicos en general) no es buen gestor y tiende al derroche y a la ineficiencia. Bien, esto es la teoría y por supuesto que es muy discutible.

En ULEG lo tenemos claro, lo importante es ser conscientes de que hay una serie de servicios y bienes que son públicos y cuyo disfrute no se puede condicionar a la capacidad económica del ciudadano: educación, sanidad, seguridad… y que como ciudadanos lo que tenemos que juzgar no es si ese servicio público nos lo presta el Ayuntamiento o una empresa, sino que lo que tenemos que valorar es si ese servicio se presta con calidad, sin discriminación, con garantías y con un coste adecuado. Es decir, lo importante no es el quién, el actor material que ejecuta ese servicio, sino el qué y el cuánto. Por eso ULEG no se opone por sistema a las privatizaciones, pero tampoco las defenderá porque sí.

Son muchas las privatizaciones que esconden contratos para favorecer a empresas amigas o una excusa para desprenderse de empleados molestos o para ningunear derechos laborales consolidados. También hay otras que realmente responden a un criterio de eficacia y eficiencia en la gestión, pensando que no hay razones para que, por ejemplo, haya funcionarios dedicados a hacer paraguas o fotocopias, porque esta tarea no es un servicio público o podría ser perfectamente realizada o subcontratada por una empresa.
En Leganés ha habido un poco de todo, y la labor de empresas como Helechos, Urbaser, FCC… tiene sus luces y sus sombras.

Por este motivo, creemos que no es prudente decir que las privatizaciones son malas o buenas sin más análisis. ULEG analizará caso por caso, buscando siempre lo mejor para los vecinos. Toda decisión girará en cinco ejes: Calidad, eficacia, coste, garantías y derechos de los trabajadores. Es necesario despojar de demagogia a estos debates y hacer un estudio detallado de qué es lo más favorable, teniendo siempre presente que cuando un servicio es público, la administración (en este caso el Ayuntamiento) siempre será el responsable del mismo, aunque no sea el Ayuntamiento o sus funcionarios quienes lo lleven físicamente a cabo. De ahí la importancia de dejar bien atados los contratos y las cláusulas con la empresas y llevar un seguimiento y control exhaustivo de su desempeño.

Por ejemplo, ULEG exigirá que la gestión de servicios públicos sólo se otorgará a empresas que garanticen la conciliación con la vida privada y familiar a sus trabajadores y que deberán abonar una indemnización o pagar una fianza previa si el servicio no se presta como debe o se incumple la carta de servicios. Éstas son solo un ejemplo de las cláusulas que se pueden incluir. Y lo importante no solo es incluirlas, sino ponerlas en marcha.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

buenso dias. madre mia carlos. la teoria esta muy bien y desde luego se nota que nunca habeis tenido responsabilidades de gobernar lo publico. no es una critica con mala leche eh? :-) yo es que creoo que esos discursos funcionan muy bien en campaña pero luego cuando intentas ponerlo en practica te encuentras una cantidad de "matices" (o mejor llamarlo INTERESES) que te das de bruces con la realidad. no siempre es asi pero en muchas ocasiones lo es. y ya os dareis cuenta de ello (ojala sea asi porque eso significaria que entrais en el gobierno): lo digo en concreto por lo de las clausulas a las que haces referencia. las empresas con mejor reputacion y eficacia en general no firmarian clausulas de ese tipo, y las que lo harian pues imaginate... y si lo firman tendrias que detallar que es "prestar el servivio como se debe" porque lo que sobran en este mundo son abogados pagados por sus empresas que hacen irse de rositas a sus clientes. en fin, yo soy muy exceptico o realista no se. lo de idealista se lo dejo a los utopicos y a iu. pero aun asi si solo consiguierais mejorar en algo la calidad de los servivios publicos ya seria un logro: con tal de que no se mangase descaradamente ya seria un exito! un saludo

Alguien como tú: Carlos Delgado Pulido dijo...

Hola.
Agradezco mucho tu comentario y considero que es una crítica muy constructiva. Al menos estamos de acuerdo en la teoría, jeje.

Un saludo.
Carlos Delgado.

Anónimo dijo...

Pues yo creo que las utopías sólo lo son mientras nadie se atreva a convertirlas en realidad. Ánimo, Carlos.

Anónimo dijo...

entonces ya no seria una utopia, por propia definicion utopia es algo que no puede lograrse o alcanzarse. otra cosa es que uno vaya tras ella y esa busqueda le haga llegar a "algo parecido a lo utopico" y con eso ya seria bastante. mas que utopicos seria mejor para los politicos que fuesen practicos y resolviesen problemas concretos de los ciudadanos. salu2

Manu, The Java Real Machine dijo...

Buena postura con la que coincido...

Habrá privatizaciones que realmente ayuden a disminuir gastos y otras que no... unas que serán buenas para el servicio, y otras que tan solo lo empeorarán.

Es cierto que es difícil llevar las cosas a la práctica, pero no es imposible.
Y decir que es una utopía me parece una excusa para no emplearse a fondo para pelearse con todos esos 'matices', optando por la vía fácil (dejarlo como está). Y lo digo sin mal rollo, pcs.

En mi trabajo también he vivido situaciones difíciles en las que la inmensa mayoría optaba por la solución fácil... y unos pocos, siempre muy pocos, optábamos por buscar una solución.

Y lo cierto es que cuesta mucho, pero al final siempre se acaba encontrando una buena solución...

El sector público tiene actualmente, a mi modo de ver, una lacra... y es el que muchos funcionarios una vez tomada posesión de su plaza, se olvidan que es en ese momento cuando comienza su vida laboral dedicada a dar un buen servicio a los ciudadanos.

Es muy tópico oir lo de que es un chollo haber sacado una plaza de funcionario, dando a entender que se acabó el tener que trabajar día tras día para demostrar tu valía de cara a la empresa.

Pero eso no debería ser así...

Por ello, creo que el Ayuntamiento, y quienes lo ocupen, deben de hacer un esfuerzo por adoptar modelos de gestión de buenas empresas privadas, buscando dar un mejor servicio a los ciudadanos (que son sus clientes) con un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles.

Y al mismo tiempo, extender ese esfuerzo a las empresas contratadas para cubrir los servicios ciudadanos.

Creo que las cláusulas son buenas, y de hecho ya se usan en muchas contratos entre la Comunidad y empresas que le dan servicio, incluyendo las penalizaciones por el incumplimiento o mala calidad del mismo.

Y si una empresa no quiere firmar esas cláusulas... pues la verdad, entonces a ti tampoco te interesa trabajar con esa empresa.

Anónimo dijo...

si estoy deacuerdo contigo manu. no dudo de que se puede llegar a ciertos minimos que hagan mejorar la calidad de los servicios publicos por medio de empresas publicas, privadas o concertadas. a mi eso me da igual siempre que por lo menos no se robe descaradamente, ya no pido que no se robe porque esta visto que en los ayuntamientos donde el presupuesto es jugoso aparecen tarde o temprano una trama de listos que dejan bajo minimos los presupuestos. y es que eso ya ocurre hasta en iu!!! que es lo que a mi mas me cabrea de todo. PORQUE NO PUEDO ENTENDERLO. y al final lo que se pone de manifiesto es que la condicion humana esta por encima de ideas o ideologias politicas de los partidos. y si una empresa no quiere firmar esas clausulas sera por dos motivos: o es una de las grandes con garantias mas que suficiente de calidad que acaparan la mayor parte de los servicios y puede permitirselo o es una empresa que sabe de antemano las quejas de sus clientes. yo creo que interesa la primera siempre porque aun no conozco ni empresas altruistas y si alguna lo es, dudo que la calidad de sus servicios esten a la altura de las necesidades de una poblacion de 175.000 habitantes como leganes. aun asi, manu, no deberia ser asi y en ese camino de busqueda del que hablas yo me apunto. aunque yo sea mas practico que utopico. salu2