La tragedia en la Calle Cobre de Leganés. Indigentes morales (II)

Han pasado ya unos días del trágico suceso ocurrido en la calle Cobre de Leganés en el que dos personas murieron por el incendio de sus infraviviendas. Como habrán podido ver no hemos enviado desde ULEG ningún comunicado público y nuestras declaraciones se han limitado a decir que, lamentablemente, sólo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena. No queríamos actuar en caliente, ni traducir en palabras la rabia y frustración que sentíamos en esos momentos. Pero creemos que ya ha llegado el momento de hablar.

Saben que nuestras denuncias sobre la situación del chabolismo en Leganés (nos da igual la zona y a quién pertenezcan los terrenos) y las condiciones en las que viven muchos de nuestros vecinos (nos da igual si están empadronados o no, si tienen rh A o B), así como las propuestas para buscar soluciones han sido constantes y reiteradas. Es más, incluso una las iniciativas con las que prácticamente inauguramos la legislatura fue una pregunta en el pleno de octubre de 2007 en la que inquiríamos al gobierno local si estaba entre sus planes construir un albergue para indigentes y dar una solución efectiva e integral a este problema. ¿Ha servido de algo? ¿Servirá de algo?

Que quede claro que la culpa de la muerte de estas personas, si es que se puede hablar en estos términos, es el infortunio, la desgracia que suele cebarse en aquellas personas que se han visto abocadas a vivir en el alambre de la marginación y la exclusión social. ¿Pero y los responsables? ¿Quiénes son? En nuestro caso, ULEG se siente responsable por no haber denunciado aún más los hechos, por no haber sabido con nuestras mociones, ruegos, preguntas, notas de prensa, etc., movilizar y convencer al gobierno de Leganés para que haga un centro de acogida, por no insistir más en que hay que buscar una solución a estas personas que viven en unas condiciones intolerables e inhumanas, por no mandar escritos oficiales a la CAM, al Estado o a quien fuera para que se tomaran medidas, por… Pero dicho esto, me gustaría que la concejal Emilia Quirós, el alcalde, la coalición de gobierno PSOE-IU en su conjunto se miraran al espejo, examinaran su conciencia y se preguntaran ¿Y de nuestra responsabilidad qué?

Dudo mucho que alguno o alguna tengan la conciencia tranquila. Sabemos que la memoria es muy selectiva, pero no pueden quedar impunes comentarios como: “si tanto defiende un albergue, lo ponemos enfrente de su casa” o “no queremos un albergue porque atrae miseria y no queremos miseria en Leganés, ni que vengan los indigentes de Getafe, Usera, Villaverde”, o tantas otras barbaridades que hemos tenido que oír de quienes se dicen de izquierdas y sólo ponen fronteras, muros, rh y clasismo en sus recetas “sociales”. Esto lo hemos oído de nuestros gobernantes locales, y por lo que se está viendo en las declaraciones de la edil de Servicios Sociales, parece que la postura política sigue siendo la de enrocarse en el error y atrincherarse en la contradicción, en la demagogia, en la media verdad o la pura mentira y en la desfachatez.

Ahora dice la Sra. Quirós que comparecerá en pleno por propia iniciativa para dar explicaciones. Ya sabemos que en realidad lo que hará será “compadecer”, y que no dará explicaciones, sino excusas. Lo siento por ella y por el papelón que se verá obligada a hacer, porque la tengo respeto e incluso cariño como persona, pero creo que lo mejor que podría hacer es dimitir de su cargo. Tanto el alcalde como la señora Quirós han apostado por instalarse en su castillo de autocomplacencia, sectarismo y arrogancia sin darse cuenta de que las paredes de esa “fortaleza” no son ni de pladur y que sus muros son más endebles que los tristes chamizos en los que perdieron la vida estos dos vecinos.

En fin, hoy lo digo otra vez, y con más razón si cabe. Pese a quien pese, duela a quien duela: Señores del gobierno de Leganés, unos por acción y otros por omisión o sumisión, son ustedes unos indigentes morales.