martes, 4 de abril de 2017

Un alcalde que está dejando Leganés en los huesos

Antes de que este artículo salga publicado en el "periódico" del alcalde pagado por todos los vecinos de Leganés, por cortesía a nuestros lectores os lo dejamos aquí en primicia.

Hola vecinos.

Volvemos a encontrarnos en un periódico que, como el Guadiana, aparece y desaparece pero que no falta a la cita de exprimir las arcas de este ayuntamiento y de maquillar una lamentable gestión. Un Leganés que es la ciudad con más fortaleza en el mundo porque por mucho que se empeñen el PSOE y el PP no son aún capaces de cargársela.

En un municipio con 14.000 desempleados, con familias que pasan apuros, con negocios que o cierran o sobreviven a duras penas, duele ver al gobierno cómo no sólo no se preocupa de sus vecinos, sino que además despilfarran en "prioridades" como una rotonda que costará 12 millones de euros, en directores generales que supondrán 4 millones de euros en esta legislatura y que no saben ni atarse los cordones, o en pagar indemnizaciones y sentencias por chapuzas de todo tipo...Luego nos venden que las cuentas tienen superávit. Entonces, ¿Por qué a los vecinos les dicen que no hay dinero?


Que Leganés sea una localidad optimista y donde sus gentes encaran la vida con ganas, no puede ocultar el fiasco del PSOE y de sus socios: un florero exIU, un tránsfuga de Cs y 6 ediles del PP rendidos por un pasado lleno de escándalos que hacen que “contubernien” con el alcalde para taparse mutuamente y pactar silencios, con el Urbanismo y el EMSULE como telón de fondo, lo que ha motivado que 50 afiliados del PP se hayan dado de baja al no soportar tanta vergüenza.

Tenemos un gobierno tan torpe que ni tan siquiera son capaces de poner o de imponer a la contrata de basura que pongan un pedal al contenedor. Es un gobierno que cree que enterrando los problemas dejan de existir: si hace un año quisieron sepultar la expiscina Solagua, ahora tapian el centro cívico de Leganés Norte que se quedó en mero esqueleto. Un esqueleto que sigue siendo la Biblioteca Central y que lo va a ser el pabellón Manuel Cadenas. Por no hablar de los cachopos, chupitos y mariscadas del alcalde a costa del contribuyente. La ciudad la deja en los huesos. Él es evidente que no.

La lista de excusas del PSIU y satélites son infinitas. La más patética es la de que la culpa es de la Oposición. No merece la pena ni contestar. Si no saben, no quieren o no pueden gestionar que se echen a un lado, dejen de chupar del erario (casi 40 años ininterrumpidos) y permitan que un equipo comprometido, ilusionado y que siente y le duele Leganés como es el formado por ULEG se ponga al frente de esta ciudad. Con ideas y con propuestas, sin falsas promesas y sin excusas. Ese es el proyecto que tenemos para hacer de Leganés la segunda capital de Madrid. ¿Te apuntas?

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