En España no ha habido una revolución que cortara cabezas de monarcas y esa ansia de sangre, aunque sea en sentido metafórico, parece estar en el ADN de algunos compatriotas. Como toda entidad carente de liderazgo y atormentada por sus complejos, el Gobierno de la Nación mantiene la tesis de que hay que ser "débil con el fuerte y fuerte con el débil", y qué mejor víctima en el plano institucional que coger a los ayuntamientos como el chivo expiatorio y el desahogo político de una incompetente gestión estatal que siempre ha estado liderada en los últimos 30 años por el partido único del PPSOE.
Los ayuntamientos son las administraciones más cercanas a los ciudadanos, las que soportan las demandas vecinales, las que ponen cara, nombre y apellidos a esas mismas personas que para otras administraciones son solo números. Los ayuntamientos son gigantes en cuanto a responsabilidades y enanos en cuanto a competencias y en financiación. Los ayuntamientos son las instituciones que mejor representan las sensibilidades políticas y sociales del territorio donde se asientan. Son una entidad política natural, o dicho de otro modo, no son artificios como pueden ser las provincias o las comunidades autónomas. Los ayuntamientos son el mejor termómetro de lo que se cuece en la sociedad. No en vano, el advenimiento de la II República fue fruto de los resultados en unas elecciones municipales. Por otro lado, la deuda de las Administraciones públicas en España se eleva a los 800.000 millones de euros, una cifra de la que sólo 28.000 millones corresponde a los ayuntamientos y que en su 60% corresponde a las grandes ciudades. Sólo Madrid tiene una deuda de 7.000 millones. Sin olvidar que más del 80% de los concejales no recibe retribución por su labor... Pues bien, a D. Mariano y a toda la caterva de casquivanos que le aplauden y le ríen las gracias, no se le ocurre otra cosa para "regenerar" la administración que recortar un 30% de los concejales existentes. ¡Bravo! dirán algunos, ¡Ya era hora, eran muchísimos!, dirán otros, sin plantearse si no es la misma hora para reducir diputados nacionales, autonómicos, miembros del Senado o el Senado mismo, para liquidar instituciones inútiles y cementerio carísimo de elefantes políticos como el Consejo de Estado, el Tribunal de Cuentas... Por no hablar del despelote existente en empresas públicas, consorcios de todo tipo, televisiones autonómicas, organismos controlados por capital público y un largo etcétera. Pero no, la culpa es de los ayuntamientos.
Arrastrados por el cortoplacismo y por el tiro al blanco al político (más bien a un determinado tipo de político), no nos damos cuenta del golpe de estado a la democracia local que quiere imponer el gobierno "popular". Recortar un 30% de los concejales no supone recortar 30% de nóminas, de cargos, de burocracia o de gastos superfluos, ya que insistimos que más de un 80% de los mismos no cobra (ver noticia), es recortar a la democracia misma. Con esta medida, que además ha de ser aprobada mediante reforma de la Loreg y no por decreto, sólo ganan los de siempre, los que nos han metido donde estamos y nos hunden cada día más al "salvarnos": el PPSOE, puesto que el bipartidismo ya de por sí exacerbado, se convertirá en ley sagrada e intocable. Con la reducción que se propone, y no pondremos el caso de Leganés como ejemplo para que nadie piense que es una opinión interesada, un municipio como Miraflores de la Sierra (por población, unos 6.000 habitantes, prototipo de municipio español) y donde se reparten 13 ediles, se vería reducido a 9. Pues bien, con este nuevo criterio, si ahora hay cuatro partidos con representación, sólo habría tres, quedando fuera una formación que supera con creces la ya de por sí elevada barrera electoral del 5%, ya que se quedaría fuera en este caso IU, con más de 200 votos y con el 7,18% de los votos. Esta situación se repetiría, incluso de manera más sangrante en cientos de municipos españoles. Pueden hacer ustedes la prueba.
Los ayuntamientos son las administraciones más cercanas a los ciudadanos, las que soportan las demandas vecinales, las que ponen cara, nombre y apellidos a esas mismas personas que para otras administraciones son solo números. Los ayuntamientos son gigantes en cuanto a responsabilidades y enanos en cuanto a competencias y en financiación. Los ayuntamientos son las instituciones que mejor representan las sensibilidades políticas y sociales del territorio donde se asientan. Son una entidad política natural, o dicho de otro modo, no son artificios como pueden ser las provincias o las comunidades autónomas. Los ayuntamientos son el mejor termómetro de lo que se cuece en la sociedad. No en vano, el advenimiento de la II República fue fruto de los resultados en unas elecciones municipales. Por otro lado, la deuda de las Administraciones públicas en España se eleva a los 800.000 millones de euros, una cifra de la que sólo 28.000 millones corresponde a los ayuntamientos y que en su 60% corresponde a las grandes ciudades. Sólo Madrid tiene una deuda de 7.000 millones. Sin olvidar que más del 80% de los concejales no recibe retribución por su labor... Pues bien, a D. Mariano y a toda la caterva de casquivanos que le aplauden y le ríen las gracias, no se le ocurre otra cosa para "regenerar" la administración que recortar un 30% de los concejales existentes. ¡Bravo! dirán algunos, ¡Ya era hora, eran muchísimos!, dirán otros, sin plantearse si no es la misma hora para reducir diputados nacionales, autonómicos, miembros del Senado o el Senado mismo, para liquidar instituciones inútiles y cementerio carísimo de elefantes políticos como el Consejo de Estado, el Tribunal de Cuentas... Por no hablar del despelote existente en empresas públicas, consorcios de todo tipo, televisiones autonómicas, organismos controlados por capital público y un largo etcétera. Pero no, la culpa es de los ayuntamientos.
Arrastrados por el cortoplacismo y por el tiro al blanco al político (más bien a un determinado tipo de político), no nos damos cuenta del golpe de estado a la democracia local que quiere imponer el gobierno "popular". Recortar un 30% de los concejales no supone recortar 30% de nóminas, de cargos, de burocracia o de gastos superfluos, ya que insistimos que más de un 80% de los mismos no cobra (ver noticia), es recortar a la democracia misma. Con esta medida, que además ha de ser aprobada mediante reforma de la Loreg y no por decreto, sólo ganan los de siempre, los que nos han metido donde estamos y nos hunden cada día más al "salvarnos": el PPSOE, puesto que el bipartidismo ya de por sí exacerbado, se convertirá en ley sagrada e intocable. Con la reducción que se propone, y no pondremos el caso de Leganés como ejemplo para que nadie piense que es una opinión interesada, un municipio como Miraflores de la Sierra (por población, unos 6.000 habitantes, prototipo de municipio español) y donde se reparten 13 ediles, se vería reducido a 9. Pues bien, con este nuevo criterio, si ahora hay cuatro partidos con representación, sólo habría tres, quedando fuera una formación que supera con creces la ya de por sí elevada barrera electoral del 5%, ya que se quedaría fuera en este caso IU, con más de 200 votos y con el 7,18% de los votos. Esta situación se repetiría, incluso de manera más sangrante en cientos de municipos españoles. Pueden hacer ustedes la prueba.
¿Qué ganamos con esta reforma? Nada. Perder más democracia, pluralidad, dejar sin presencia institucional a multitud de sensibilidades políticas y sociales, implantar artificialmente un duopolio o monopolio alternativo asfixiante y, a la vista de los resultados, ineficaz. En realidad, otro pasito más para que este sistema salte por los aires como el régimen Canovista, ya tantas veces comentado y que tantas tristes similitudes guarda con el actual.
14 comentarios:
Es evidente que esa propuesta se hace para calmar las criticas que incluso desde el mismo PP se han hecho a las ultimas reformas y poder argumentar que también se "mete mano" a los políticos.
Pues nada más lejos de la realidad.
Esta medida sólo se podrá aplicar en el caso de la reforma de una ley orgánica, con lo que eso representa, y en ningún caso tendrá efecto antes de la próxima legislatura, es decir, en el 2014.
Pero el supuesto ahorro nunca será efectivo porque lo que sucederá es que los concejales reducidos pasarán a engrosar la nómina del personal de confianza.
Si en Leganés quitamos 3 concejales y por los favores debidos del alcalde de turno los nombra asesores, significa que unas dietas de 16.000€ al año por cada uno y pagaríamos una nómina de 54.000.
Nos gastaríamos 114.000€ más.
Lo que se debe prohibir de una vez el la posibilidad de nombrar cargos de confianza, que bajo el título de "asesores" son los que se llevan la parte del león de ese gasto.
Sería más lógico que todos los concejales cobraran un sueldo en función de su dedicación, sin dejarlo al albur del alcalde de turno, fijado o limitado por ley en proporción a los presupuestos y número de habitantes y sin posibilidad del nombramiento de personal de confianza.
En el caso de Leganés, ¿cómo es posible que de los 1700 empleados del Ayuntamiento ninguno merezca la confianza de D. Jesús?
¿Porqué ha tenido que nombrar a 35 más?
El alcalde y los concejales son los que deben ser de confianza para los vecinos y con ellos sobra.
Kane
Dejando aparte algunas cosas, como lo del carácter natural del municipio, discutible, aunque muy querido para el Antiguo Régimen, Franquismo, y en los números, pues creo que los Ayuntamientos tiene más "culpa" del déficit de lo que Vd. dice, pues la deuda de las CC. Autónomas, se genera también en ellos, en lo demás no anda muy desencaminado.
El reducir el número de concejales, es matar moscas a cañonazos, para contentar a los que quieren "matar" a los políticos.
Como ha dicho el anterior comentario, el verdadero cáncer son los cargos de "confianza", y más aún el clientelismo político, el enchufismo funcionarial añado yo.
Se debieran establecer mecanismos para que el acceso a la función pública fuera además de verdaderamente limpio, reducido al estrictamente necesario.
No más Leganeses "enchufados".
Ruf.
Hola:
Hay que ser valiente y decirlo: el español medio es un inepto a la hora de elegir a sus políticos.
¿ Ustedes elegirían a un señor ,que no supo hacer oposición, al Psoe de Montoya? Algunos pepineros sí...
¿ Ustedes elegirían a un señor que lidera un partido que dónde gobierna arruina y despilfarra? Los votantes de Mariano Rajoy sí...
http://www.elconfidencial.com/espana/2012/07/20/valencia-primera-comunidad-que-pide-el-rescate-102319/
¿ Ustedes llamarían socialista a un partido como el Psoe? Varios millones de españoles sí...
¿ Un país serio soportaría a una casta política parásita e inútil como la nuestra? Lo dudo.
¿ Todavía se preguntan por qué somos el hazmerreir de Europa?
Saludos.
Y hablando de popular que es peor ser popular o ser populista vamos a dejarlo claro.
Las gracietas populistas nos llevaron a la ruina, no una sino dos veces y las medidas populares nos han hecho despertar para bien o para mal así es la cruda realidad y así lo veo yo.
El español no es inepto eligiendo políticos, en general, los políticos y el resto de los ciudadanos, españoles o no, tenemos un gran defecto de fabricación, y no tenemos un buen fondo. Al que le ponen a tiro el poder, prestigio y dinero, tiende a corromperse, ya sea en política o en cualquier otra faceta. El hombre es un lobo para el hombre (y la mujer, claro).
España, nuestra querida, al menos para mí, piel de toro, curtida por mil vientos y avatares.
No es ni mejor ni peor que otros países, son las circunstancias que diría Ortega.
Decir lo contrario es pura frivolidad o dicho en cristiano, una "españolada", poco seria por cierto.
Las causas de lo actual, están ahí: burbujas, falta de regulación, excesivo descontrol del gasto público, la "pólvora del rey".
Esto, junto a cuestiones de más calado como la frágil estructura económica, difícil articulación territorial, y la falta de una "ética" pública.
Mas el contexto internacional, la mundialización de la economía, el despertar de los emergentes, y todo eso.
Nos sitúan en lo actual. Al menos es mi opinión, que está en línea con la de Juan Velarde, Ignacio Sotelo, Ramonet, etc..........
Pero esto, con sus matices, no es solo español, ¿Dónde no ha ocurrido alguna vez?.
Por ello dejemos de auto flagelarnos.
Para terminar, lo que yo pediría: "Gasta lo público con el mismo cuidado que si fuera de tu bolsillo".
Saludos.
Ruf.
Somos muchos los que estamos esperando que Carlos tome una decision YA, y somos muchos los que le apoyaremos, y creo que somos también bastantes que la próxma votaremos a ULEG.
Estamos en esta situacion en gran parte por el ladrillo y seguimos con el en este pueblo , porque nadie se quiere dar cuenta de parar esa locura
Desde mi ignorancia, antes de qitar :
Pagas a los funcionarios, reducir concejales, subir ,iva,ect........
No se reduce el Senado, loa traductores del mismo,cargos de confianza en todo su sentido de la palabra, por funcionarios de carrera y no enchufados de amiguísimo, tenemos de donde recortar y no del pobre funcionario que se tira años, preparando un aopasicion, que es el verdadero asesor o cargo de confianza y no el puesto a dedo, por pelota , amiguísmo interesado,pero como siempre la envidia en épocas de vacas flacas siempre va dirigidas,contra los mismos, para aquellos que sudan, para obtener un trabajo digno y mal remunerado.
Que pasaba hace unos años, cuando gente sin conocimientos vasicos cobraban dos mil tres mil euros, y a la mayoría no los restregaban por la cara y se reían a carcajadas, acuerdesen del refrán de cigarra y la hormiga.
Ya esta bien de tomarnos el pelo y toda y todos se hamos honrados con nosotros mismos.
De la ignorancia, o dicho de otra forma: del desconocimiento, del desinterés o de la apatía del pueblo sobre cuestiones de alto nivel político, vienen vegetando desde hace muchísimos años varias castas de distintas "ideologías", cuyos miembros/as, una vez asentados/as en los escaños del poder que le otorgamos desde el pueblo soberano en las urnas, parecen transformarse en cuestión de pocos días en algo parecido a esos semidioses aventureros de fantasía, que por no sabemos qué droga de diseño mental, acaban creyéndose "imprescindibles. intocables y, al tiempo, por encima del bien o del mal; pero eso sí: en lo bueno, en lo menos bueno o en el abismo económico, siempre dispuestos a trabajar por el bien de su pueblo desde el butacón; como si ninguno de ellos pudiera reciclarse en "individuo generador de riqueza", que es lo que le ocurre a buena parte de los conciudadanos que engordan cada día las listas de espera laboral.
Como acertadamente se comenta en este blog, la cuestión no radica en la reducción drástica del 30% de concejales, pues todos sabemos la jugada del "donde dije, digo, ahora diego Diego", sino de la redistribución de los mismos -dado la que esta cayendo-,en las concejalías de peso y necesidad social, mediante un estudio previo de reparto de asignación mensual al prescindir radical e irremediablemente de asesorías innecesarias, cargos de confianza duplicados (que para eso están los técnicos contratados)y creando, vista la necesidad imperiosa de subsistencia de muhos ciudadanos, leganenses en nuestro caso, de una Nueva Concejalía denominada "DE LA FAMILIA", que se encargue de conocer exhaustivamente las precariedades de nuestros vecinos y el estudio individualizado de las unidades familiares del municipio, empezando por aquellas que se encuentran con todos los miembros en paro o con nulo poder adquisitivo, así como de las que necesiten alguna aportación extra para cubrir sus necesidades básicas; todo ello mediante la merma o anulación de presupuestos o partidas asignadas a cuestiones de obras de gran calado urbanístico, arquitectónico o artístico -que pueden esperar-, limitando al microurbanismo y al mantenimiento las partidas necesarias, también susceptibles de recorte por orden preferencial.
Resulta absolutamente necesaria la "solidaridad" de todos y cada uno de los funcionarios de carrera, empleados públicos del municipio, trabajadores de los sectores productivos y empresariales,amén de que por los medios legales que por obligación, moralidad y respeto a la ciudadanía deben adoptarse aquí, en esta España de todos, se obligue a devolver hasta a el apuntador, por las buenas o por las nada buenas, hasta el último céntimo sustraído por medio de..., desviado a ..., invertido con cargo a y para ..., malversado hacia...
Sea del "color de sangre que sea", "Caja o banco que sea" o haya estado en el cargo de responsabilidad-irresponsable que sea o haya sido, si esa responsabilidad le ha costado una parcela de vacío a las arcas del Estado, que somos todos, tiene que volver a casa antes de Navidad, con una invitación personalizada al "Hotel Rejas" y, por supuesto, sin ningún tipo de anmistía fiscal.
Las suscripciones populares para causas humanitarias y solidaridas intervecinales, administradas por un "banco local de resistencia" por concejales altruistas ante esta crisis generada, como siempre por los mismos/as, se está pidiendo a gritos. No vale el ¡¡Sálvese el que pueda!!
Don Jesús, conciudadano, alcalde: la adversidad mide a los grandes políticos, y la historia, que no a todos recuerda, abre una página a aquellos que mantienen orgullosos a los que viven bajo su gobierno y resulta atractivo para los que viven lejos.
Con todos mis respetos y sin ánimo de ofender.
Vicente Gordillo Carmona
Carlos en la edición de hoy de el mundo habla del apoyo ciudadano de mas del 90 por ciento a la reducción de concejales
Si,si, quitamos a todos los concejales, eliminamos el Congreso y el Senado y ponemos un solo Dictador y nos ahorramos mogollón.
Me parece muy correcta la argumentación pero me parece que demuestra algo de temor de ULEG por quedarse sin representación. Este año os he votado por primera vez y compruebo que sois los menos malos pero hay que hacer lo posible por acercarse a la ciudadanía. Cuando en el primer pleno de esta legislatura no fuisteis capaces de votar para bajar el sueldo de los concejales, os retratasteis. Puedo comprender que vuestro trabajo es excelente pero no menor que el de un barrendero, un administrativo, un maestro... y ninguno de ellos llega al sueldo que tenéis, sin contar dietas. Estáis en una situación privilegiada para decidir con vuestro voto las decisiones de PP O PSOE y debéis aprovecharlo. Bajaros el sueldo y luego empezamos a hablar de lo que hacen los otros. De todas formas, creo que lo estáis haciendo relativamente bien.
Los que se quedan sin representación no son los partidos, son los ciudadanos. Esos ciudadanos que eligen un partido o formación política y aun teniendo un importante número de votos se puede quedar fuera su voz de las instituciones.
En cuanto a sueldos, me consta que en esta legislatura se han bajado considerablemente en Leganés. Lo que no se aprobó fueron las patochadas de PSOE e IU, que tuvieron 32 años para hacerlo y se apuntaron a la demagogia justo un día después de perder las elecciones.
A mí no me preocupa el sueldo de los políticos. Es más, pienso que en algunos casos cobran hasta poco. Lo que me preocupa es lo caro o barato que resulte en términos de buen hacer. Zapatero y Rajoy nos salen carísimos aunque su sueldo fuera 0 euros.
Yo también opino que Uleg lo está haciendo relativamente bien, más aún si lo comparamos con el resto.
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